En estos días, parece que todo el mundo está constantemente tratando de ponerse en forma y adelgazar. El vino blanco contiene esos antioxidantes mágicos de los que tanto se habla, específicamente epicatequina, quercetina y resveratrol. ¿Qué tienen en común todas esas palabras difíciles de pronunciar? Te ayudan a recortar esa cintura. Los antioxidantes favorecen la pérdida de peso cuando se consumen una o dos copas de vino blanco al día. Sin embargo, tenga cuidado: ¡complacerse en exceso tendrá el efecto contrario porque las calorías pueden acumularse rápidamente!

La prevención de enfermedades, la investigación revela que el vino blanco puede proteger contra algunas formas de cáncer, especialmente el cáncer de intestino. Contiene flavonoides que tienen propiedades antioxidantes, al igual que el vino tinto, que ayuda a prevenir el cáncer. Pero eso no es todo. En 2002, se descubrió que el vino blanco protege las células del cáncer de mama con la misma eficacia que el vino tinto. Sabemos que el cáncer no es lo único que afecta la salud de nuestra comunidad. El vino blanco también se ha relacionado con una mejor función de la memoria y la prevención general de la enfermedad de Alzheimer, que afecta a más de 5 millones de personas.